El Sexto Sentido

Las personas que "escuchan voces o ven cosas que no existen" son diagnosticadas como esquizofrénicas con trastornos mentales crónicos. Curiosamente en la historia de la humanidad hay un sin fin de personas que en su momento "escucharon voces" ya sea provenientes de una zarza ardiendo, que les informaban de diluvios universales, que pasaban años meditando hasta ser "iluminados", acostados pintando el techo de la capilla Sixtina, escribiendo o componiendo verdaderas obras de arte que se...
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Las personas que "escuchan voces o ven cosas que no existen" son diagnosticadas como esquizofrénicas con trastornos mentales crónicos. Curiosamente en la historia de la humanidad hay un sin fin de personas que en su momento "escucharon voces" ya sea provenientes de una zarza ardiendo, que les informaban de diluvios universales, que pasaban años meditando hasta ser "iluminados", acostados pintando el techo de la capilla Sixtina, escribiendo o componiendo verdaderas obras de arte que se conservan hasta nuestros días. Inspirados, por "algo" o por "alguien" que desde el más allá o del más acá, ¡vaya uno a saber! les daban "instrucciones" de lo que debían hacer y cómo debían hacerlo. Con el pasar de los siglos esos seres humanos pasaron de ser locos a ser dioses, profetas, santos, iluminados, gurús, visionarios y en el mejor de los casos, inventores o científicos.Nada extraño entonces que esos seres humanos estuvieran sensibilizados y sintonizados para escuchar el mensaje de seres que están en otras dimensiones, del universo mismo o de esa fuerza creadora y conservadora del universo que es Dios. ¿Es el sexto sentido entonces el encargado de captar esos mensajes? Yo pienso que sí. Solo que como cualquier aparato electrónico que sirva para captar mensajes, es necesario que nuestros dones y talentos estén lo suficientemente sensibilizados y sintonizados para que puedan captar la frecuencia indicada y así obtener la información que necesitamos para mejorar nuestras habilidades.Lo invito pues amable lector a que juntos analicemos desde el sentido común cada una de las etapas de nuestra vida, al final sabremos qué tan esquizofrénicos (locos) estamos, que tan "iluminados" o que nos demos cuenta que ¡estamos vivos de milagro!