El Trisagio Celestial

Una máxima que en esta época puede ser un poco difícil de aceptar - cuando trastornos políticos, crisis económicas, guerras y rumores de guerra, y desastres naturales parecen ser nuestra suerte diaria. ¿Se ha olvidado Dios de nosotros? ¿O hemos nosotros olvidado a Dios? No, no hemos olvidado a Dios. Es sólo que no tenemos la suficiente fe para aceptar su voluntad en vez de la nuestra - ni la suficiente esperanza para confiar en El en vez de dinero en el banco - ni la suficiente...
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Una máxima que en esta época puede ser un poco difícil de aceptar - cuando trastornos políticos, crisis económicas, guerras y rumores de guerra, y desastres naturales parecen ser nuestra suerte diaria. ¿Se ha olvidado Dios de nosotros? ¿O hemos nosotros olvidado a Dios? No, no hemos olvidado a Dios. Es sólo que no tenemos la suficiente fe para aceptar su voluntad en vez de la nuestra - ni la suficiente esperanza para confiar en El en vez de dinero en el banco - ni la suficiente caridad para arrojarnos en sus brazos y cantar sus alabanzas aun cuando todo en nuestro alrededor no tiene sentido. Pero, esto es lo que debemos hacer. El es, sí, un Padre. Nos creó. Nos redimió. Y todo lo que haga - si nosotros lo juzgamos tanto bien, mal o indiferente - es para nuestra santificación. Por eso el Salmista dice: "Confía tu suerte al Señor y El te sostendrá." El Trisagio es una manera excelente de cumplir con este consejo. Es sencillo. Es breve. Y en muy poco tiempo seremos persuadidos de que, aunque sus caminos no son los nuestros, son los caminos de amor - un amor en que El quiere que participemos por toda la eternidad.